Por: Laura Camila
Casi toda la ropa que saco de mi clóset en diciembre es la que ya no me queda buena porque adelgacé o me engordé. Casi nunca es ropa que odie o que ya no me ponga, sino que nunca me pude poner porque me la medí de afán en el almacén.
También me pasa que compro ropa en una talla más porque me enamoro de la prenda y luego la mando a arreglar en un «sastre», pero eso requiere plata, tiempo, y pues, nosotras preferimos hacer todo en nuestra casa con nuestras propias manos. Así que hoy les vamos a enseñar una forma de arreglar un pantalón que les queda grande sin tener que quitarse la pijama.
Solo necesitan un resorte, un cortador, una nodriza, hilo y aguja.
- Corten más o menos 10 cm de resorte y asegúrense de que sea un poco menos grueso que la pretina del pantalón que van a arreglar. Nosotras pusimos solamente un trozo de resorte en la parte de atrás; es más práctico que atravesarlo por toda la pretina.
- Por dentro de la pretina, hagan un corte del ancho del resorte, por donde van a insertarlo. Hagan lo mismo en el otro extremo; donde terminaría el resorte.
3. Metan un extremo del resorte en una nodriza y ciérrenla.
4. Insértenla por uno de los huecos que hicieron anteriormente. Muevan el resorte y la nodriza hasta el otro hueco y sáquenlos.
5. Con hilo y aguja cierren el primer hueco.
6. Halen el extremo que sale por el otro hueco para que el resorte se recoja, como ven en la foto. Cuando ya esté recogido, empiecen a coser el otro extremo y corten lo que sobra.
¡Eso es todo!
Ya se podrán poner ese pantalón que lleva meses en su clóset porque les ha dado pereza ir a arreglarlo. Si usan este truco, muéstrennos cómo les quedó en nuestro Instagram: @idearioblog.
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